Errores Comunes al Redactar un Contrato de Prestación de Servicios y Cómo Evitarlos

El contrato de prestación de servicios es una herramienta legal comúnmente utilizada en Colombia para establecer una relación entre el contratante y el contratista sin generar subordinación directa, como ocurre en un contrato laboral. Sin embargo, su incorrecta redacción puede llevar a problemas legales, transformando el contrato de servicios en uno laboral, lo que acarrea consecuencias significativas para el contratante. A continuación, se describen los errores más comunes al redactar este tipo de contratos y cómo pueden evitarse.

1. Imponer un Horario Fijo

Uno de los errores más frecuentes es imponer un horario fijo al contratista. En un contrato de prestación de servicios, el contratista debe tener la libertad de decidir cómo y cuándo realizar su trabajo, ya que su autonomía es uno de los principios fundamentales de este tipo de contrato. La imposición de un horario puede ser interpretada como un indicio de subordinación, lo que podría transformar el contrato en uno laboral【1】.

Cómo evitarlo: En lugar de imponer un horario, es recomendable establecer fechas de entrega o plazos para los resultados esperados. Esto asegura que el contratista tenga flexibilidad en la organización de su tiempo, manteniendo su independencia y evitando la creación de una relación laboral encubierta【2】.

2. Uso Incorrecto de Terminología

El uso de términos propios de un contrato laboral, como "empleador" y "trabajador", es otro error que puede generar confusión y problemas legales. En un contrato de prestación de servicios, los términos correctos son "contratante" y "contratista". Utilizar lenguaje laboral puede dar lugar a interpretaciones que lleven a la configuración de un contrato realidad, donde el contratante estaría obligado a reconocer derechos laborales al contratista【3】.

Cómo evitarlo: Es fundamental utilizar la terminología correcta en el contrato, asegurando que se respeten los principios de autonomía y no subordinación. Además, es importante evitar palabras que sugieran una relación laboral, como "subordinación" o "salario", que son propios de contratos laborales【4】.

3. Exigir Exclusividad

Imponer que el contratista trabaje de manera exclusiva para el contratante puede ser otro indicio de subordinación. Un contratista, en teoría, tiene la libertad de trabajar para múltiples clientes al mismo tiempo, y la exigencia de exclusividad puede crear una dependencia económica que se asemeja a la de un trabajador empleado.

Cómo evitarlo: Si es necesario pactar exclusividad, debe justificarse claramente en el contrato y limitarse a un periodo específico o a un proyecto determinado. Esta cláusula no debe convertirse en una condición permanente, ya que esto podría sugerir una relación laboral【5】.

4. Supervisión y Control Continuos

La supervisión constante de las actividades del contratista también puede ser un error. En un contrato de prestación de servicios, el contratante debe centrarse en los resultados y no en el proceso por el cual el contratista lleva a cabo sus funciones. La intervención constante en cómo se realizan las tareas puede interpretarse como subordinación, lo que afectaría la naturaleza del contrato.

Cómo evitarlo: El contrato debe detallar los objetivos que el contratista debe cumplir, pero evitar imponer un control sobre el proceso de trabajo. Evaluar el cumplimiento de los resultados finales es suficiente para asegurar la calidad del trabajo, sin generar una relación de dependencia【3】【6】.

5. No Definir Claramente la Duración del Contrato

Uno de los errores más graves es no definir claramente la duración del contrato. Cuando no se especifica un plazo o este se extiende indefinidamente sin una formalización adecuada, se corre el riesgo de que la relación contractual se confunda con una relación laboral de carácter permanente.

Cómo evitarlo: Es esencial que el contrato establezca con claridad la duración del acuerdo, con una fecha de inicio y una de finalización. Si se necesita renovar el contrato, debe hacerse mediante un nuevo contrato o un anexo que formalice la extensión de la relación, pero evitando que se genere una continuidad indefinida【7】.

6. No Incluir Cláusulas sobre la Seguridad Social

La afiliación a la seguridad social es una obligación del contratista en un contrato de prestación de servicios. Sin embargo, uno de los errores comunes es no establecer con claridad quién debe asumir esta responsabilidad, lo que puede generar problemas legales y financieros tanto para el contratante como para el contratista.

Cómo evitarlo: El contrato debe incluir una cláusula que establezca claramente que el contratista es responsable de su afiliación y pago de aportes a la seguridad social, incluyendo salud, pensión y riesgos laborales. Esto protege al contratante de cualquier reclamación futura relacionada con la seguridad social【1】【8】.

Conclusión

Un contrato de prestación de servicios debe redactarse con precisión para evitar que se interprete como un contrato laboral. Es esencial que se respeten los principios de autonomía, que se utilice la terminología adecuada, y que se eviten prácticas que impliquen subordinación o dependencia económica. Al seguir estas recomendaciones, ambas partes pueden beneficiarse de una relación contractual clara y en conformidad con las leyes colombianas【1】【7】【8】.

Referencias

  1. Gerencie.com. (2024). Contrato de prestación de servicios. Recuperado de https://www.gerencie.com/contrato-de-servicios.html.

  2. Corte Constitucional de Colombia. (2001). Sentencia C-154 de 2001.

  3. Ámbito Jurídico. (2023). Contratos de prestación de servicios: mitos, verdades y miedos. Recuperado de https://www.ambitojuridico.com.

  4. Colombia. Código Civil Colombiano. (1887). Ley 57 de 1887.

  5. Corte Suprema de Justicia. (2017). Sentencia SL3859-2017.

  6. Zanabria, J., González, P., & Becerra, A. (2019). Eficiencia en la gestión pública: Retos y desafíos del contrato de prestación de servicios en Colombia. Bogotá: Editorial Jurídica.

  7. Colombia. Congreso de la República. (1993). Ley 100 de 1993.

  8. Universidad Externado de Colombia. (2020). El contrato de prestación de servicios y sus características en Colombia. Bogotá: Publicaciones Jurídicas.